martes, 1 de enero de 2013

El mito del racismo negro y del hembrismo


Desde hace un tiempo, vengo constatando un desarrollo paralelo entre el discurso de la existencia del hembrismo, en base a que hay mujeres idiotas, y se ejemplifica con una supuesta actitud racista de un negro hacia un blanco. Ambos mitos se relacionan mutuamente, repitiéndose una y otra vez como una especie de mantra.

Yo quiero exponer porqué creo que el racismo negro o el hembrismo, actualmente, no pueden darse. El racismo es un fenómeno social, en el cual toda (o al menos gran parte) institución está conformada de manera que los individuos de otras «razas»[1] están sometidas a los blancos. Así es como ha surgido y es como se mantiene actualmente. Podrían haberse dado otros desarrollos históricos en universos paralelos. Pero actualmente, aún permanecen los privilegios de personas blancas, frente a personas de otras pigmentaciones. Para simplificar, hablaré de negritud, porque es el mito más extendido.

El negro racista… o cómo bombardear con autocomplacencia a los blancos

Es conocido el mito, se pone siempre de ejemplo: «si un negro desprecia a un blanco por serlo, está siendo igual de racista». Pues aunque su actitud no sea de aplaudir, ya que está prejuzgando a una persona por motivos de color de piel, resulta que no es posible para un negro en la sociedad actual ser racista. Porque el racismo no es una respuesta individual, sino una estructura social en la cual todo tiene un orden rígido que se reduce a blancos arriba, negros abajo. Si unos cuantos individuos negros, de forma individual, tienen actitudes de prejuicio racial, podemos resaltar lo feo del gesto. Pero no «es lo mismo pero al revés». Entre otras cosas porque no disponen del control de todas esas instituciones y estamentos sociales que permitan una vuelta a la tortilla. En EEUU, por ejemplo, sigue habiendo una relación estrecha entre negritud y pobreza, y población reclusa[2]. Esto no es casual, y desde luego, nada tiene que ver con las capacidades de las personas negras. Claramente es el resultado de una estructura social. Así que no, cuando un negro es borde con un blanco… no está siendo racista. Estará siendo antipático, prejuicioso, pero no racista. El día en que hubiera matanzas de blancos por parte de negros, persecución, historia de esclavismo, «blanquización de la pobreza», etc., etc. El día en que los negros controlaran todo y los blancos estuvieran abajo, ahí habría racismo negro. Mientras tanto, habrá individuos de una identidad oprimida que reaccionan con una actitud agresiva ante individuos de identidad opresora, aunque estos últimos no pretendan mantener ese estatus. Y esta actitud, insisto, puede ser reprochable: usted no me conoce, ¿cómo sabe que yo, aun siendo blanco, no estoy interesado en destruir este orden absurdo de cosas, porque creo en la igualdad de la humanidad? Ahí tenemos al Ferrocarril Clandestino como ejemplo de que personas blancas pueden estar interesadas también en derribar esos muros[3]. No se está alabando esa actitud, simplemente le estamos dando el peso que merece, y que no es uno que equilibre ninguna balanza entre las relaciones que existen entre blancura y negritud. Precisamente es un conocido mito porque nos permite invisibilizar y normalizar el racismo, poniendo las cosas en una balanza de «a mi una vez un negro me hizo mal». Se reproduce porque nos hace sentir «confortables», precisamente por esa autocomplacencia que permite. Así como muchos otros mitos que se extienden socialmente y permiten mantener ese desequilibrio motivado por la «raza»[4].

Así que simplemente se hace necesario explicar que una actitud puede ser negativa, equivocada éticamente, lo que sea. Pero no se puede usar todo término. Acabamos simplificándolo todo a fascista, racista y sexista, en una especie de caca-culo-pedo-pis que nos idiotiza mentalmente. Existen más palabras, usémoslas, eso desarrollará nuestra capacidad cognitiva. El lenguaje es una gran forma de entrenar al cerebro.

Del mito del negro racista al bulo del ataque cotidiano hacia los hombres: la falacia del hembrismo

De igual forma, con mayor frecuencia se exponen casos de mujeres que maltratan psicológicamente, amén de todas las maldades posibles que le puedan hacer a los hombres, pasando por romperles el corazón, que es la más habitual, para intentar demostrar una especie de equidistancia. No hay equidad, por lo tanto, hablar de equidistancias es directamente absurdo. Una mujer puede ser imbécil, puede ser una cabrona despreciable que trate a un hombre de mala manera. Pero no es hembrista, porque no existe, por más que vengan hablando de lobbys, ese cambio de tortilla. En el contexto actual, siguen estando invisibilizados los trabajos de cuidados[5], la doble jornada laboral de la mujer[6], e incluso la supeditación a su marido en el caso de propiedad de tierras, explotaciones agrarias y demás[7], además de sufrir una invisibilización respecto a nuestra salud[8], entre otras muchas como menores sueldos[9], muertas por violencia de género[10], y un largo etcétera.

Existen mujeres idiotas, nadie lo duda. Como humanas, tenemos un amplio abanico de virtudes y defectos. Pero su actitud es individual, mientras que el patriarcado es una estructura social, lo que implica un desigual reparto del poder con sesgo de género, que provoca que las mujeres no participen del espacio público, que exista una división sexual del trabajo, infravalorando la correspondiente a la mujer, feminización de la pobreza, menor autonomía personal y en las relaciones sociales. Una forma de definirlo es: forma de organización política, económica, religiosa y social basada en la idea de autoridad y liderazgo del varón, en la que se da el predominio de los hombres sobre las mujeres, el marido sobre la esposa, del padre sobre la madre y los hijos e hijas, y de la línea de descendencia paterna sobre la materna. Asimismo, se universaliza el «yo» masculino, planteándolo como vara de medir y referencia, siendo uno de los fundamentos de la dominación patriarcal[11].

Por eso, por mucho que sean idiotas, no pueden ser hembristas, simplemente porque no se tiene esa capacidad. Y aunque Obama es negro, y Merkel mujer, el orden social permanece rígidamente asentado. Obviamente, se ha avanzado. Se han mellado los pilares que sostienen ese orden. Pero la única dirección posible es continuar haciéndolo. No apuntalarlos para mantener las cosas tal cual están, sino derrumbar lo que queda de ello, que aún es mucho. Y para ello, es fundamental no caer en la autocomplacencia de «para mí también es duro», «yo no tengo la vida solucionada por ser blanca», etcétera, etcétera. No, obviamente entran otros factores, entre ellos la fundamental: la clase social. Pero por ser blanco, no la tienes tan complicada como la de un negro, y por ser hombre, no te ponen las mismas zancadillas que si fueras mujer. Así que, con una analogía atlética: si al resto de personas se les ponen obstáculos, entenderemos que el primero en llegar a meta con la pista lisa está siendo privilegiado frente a los demás. Siguiendo la analogía, es posible que nuestra pretensión de hecho no sea llegar a meta, ni ganar nada en atletismo. Pero ya que se nos obliga a correr, hay que remarcar esos obstáculos que existen y denunciarlos, no detenernos en que para el corredor que gana «también es duro tener que entrenar todos los días».

Nadie está diciendo que la vida de un hombre blanco es de rosas por el mero hecho de ser varón y blanco. Ni que deba darse la vuelta a ninguna tortilla. Ni que todos los hombres blancos sean una panda de malnacidos esclavistas y machistas. Pero resulta paradójico que en una realidad en la que las mujeres mueren y cumplen dobles y triples jornadas, las personas negras se vinculan con la pobreza y la cárcel, siempre salga alguien corriendo a defender la socialmente cómoda idea de que «l@s oprimid@s te oprimen». Y no… pueden cagarse en tu madre y eso puede molestar, pero no te oprimen, sobretodo porque no pueden, al menos en base a esa identidad que se concibe como socialmente inferior.

Por favor, déjate de autocomplacencias, de buscar obsesivamente ejemplos de «mujeres que tratan mal a los hombres», de «grupos feministas que pretenden el exterminio masculino», de confundir los artículos de revistas Cosmopolitan con los postulados feministas, y de «negros que también han hecho cosas malas», «de que los gitanos son racistas con los payos» y demás sandeces varias. Deja de confundir términos, porque no hay equidistancias ni equivalencias en un contexto de desigualdad. Y deja de utilizar esos argumentos para pretender suavizar la diferencia que se da entre las clases oprimidas y las opresoras. O al menos, no te creas tan de izquierdas si no estás dispuest@ a moverte de tu área de comodidad que permite perpetuar las cosas tal y como están.





 NOTAS:

[1] Si bien el término no sea adecuado, ya que no existen realmente las razas desde ningún punto de vista médico, biológico, genético, etcétera. Las razas humanas no existen.
http://www.andercismo.com/2008/03/las-razas-humanas-no-existen.html
[2] Datos del Census Bureau de EEUU.
http://www.census.gov/newsroom/releases/archives/income_wealth/cb12-172.html 
Resumidamente, la población negra representa más del 27% de la población en situación de pobreza. Muy equiparado con la población hispana, con más de un 26%. Los blancos de origen no hispano, representan menos del 10%. Esto demuestra la clara vinculación entre identidad racial o étnica con la pobreza y la exclusión social.
[3] The Underground Railroad.
http://en.wikipedia.org/wiki/Underground_Railroad
[4] Para desmontar este tipo de mitos, un gran pensador de nuestro tiempo decidió realizar este ejercicio de compilación de argumentos contra las intoxicaciones y comeduras de tarro racistas de turno.
http://www.alasbarricadas.org/forums/viewtopic.php?f=15&t=33465
[5] Éstos son llevados a cabo por mujeres en el 99% de los casos, y que si se tuvieran en cuenta supondrían 1/3 del PIB. Pérez Orozco, A. y López Gil, S. (2011) Desigualdades a flor de piel: Cadenas globales de cuidados. ONU Mujeres. Disponible en:
http://bookcamping.cc/referencia/1220-desigualdades-a-flor
[6] Propuesta por la Titularidad Compartida, desde el MAGRAMA:
http://www.magrama.gob.es/es/desarrollo-rural/temas/igualdad_genero_y_des_sostenible/titularidad_compartida
[7] Según un estudio que está a punto de publicarse sobre las vivencias de las mujeres campesinas vascas, existe una clara discriminación en el sector agrario, predominando la falta de reconocimiento como trabajadoras agrícolas. Esto puede constatarse concretamente en que carecen de titularidad de las actividades agrícolas cuando los dos miembros de la pareja lo comparten, además de a la hora de pedir ayudas para emprender la actividad agrícola y al pretender darse de alta en la Seguridad Social Agraria.
[8] Más información al respecto en la Revista on-line Mujer y Salud, disponible en:
http://mys.matriz.net
También existe información al respecto, en inglés, en el colectivo ecofeminista Women’s Voice for the Earth.
http://www.womensvoices.org/about/why-a-womens-organization
[9] Encuesta de estructura salarial, INE. Informes anuales disponibles en:
http://www.ine.es/jaxi/menu.do?type=pcaxis&path=/t22/p133&file=inebase
[10] Información disponible en las Estadísticas del Ministerio de Igualdad (o el Ministerio en el que esté diluido):
http://www.msssi.gob.es/ssi/violenciaGenero/portalEstadistico/boletinmensual/home.htm
Y:
http://www.msssi.gob.es/ssi/violenciaGenero/portalEstadistico/home.htm 
También en la Red estatal de organizaciones feministas contra la violencia de género.
http://www.redfeminista.org
[11] Dolores Reguant (2007) Explicación abreviada del patriarcado.
http://www.proyectopatriarcado.com/docs/Sintesis-Patriarcado-es.pdf

10 comentarios:

  1. Más racistas que los blancos o los payos son los negros y los gitanos............Por algo sera..........

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  2. ¡Lo dudo! No creo que unos u otros sean mejores que el resto, entre cada uno de los diferentes grupos étnicos y sociales hay gentuza y, también, hay lo contrario. Ser de un pueblo o una «raza» determinadas no les hace, o no nos hace, mejores.

    Pero, para hablar de racismo hay que partir de dos conceptos, uno el de «raza» como subdivisión biológica de una especie, la especie humana. Ni en los biólogos ni los antropólogos hoy en día defienden tal concepto. En pocas palabras: las razas humanas no existen.

    Y por otro lado, racismo es sinónimo de supremacismo racial. Considerar que entre las «razas» humanas hay jerarquías, tanto genéticas como culturales. Que los componentes de un grupo racial o social se consideren «superiores» a los de otros grupos. Y desconozco el caso de gitanos que se consideren superiores a los payos, o de negros por encima de los blancos (como quiere darnos a entender FRM).

    Incluso, creo que muchos de ellos —y de nosotros— comprendan el significado de la palabra «racista», muy mal utilizada todavía pero poco comprendida.

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  3. "El racismo no es una respuesta individual, sino una estructura social" En mi opinión, ahí radica el meollo de la cuestión. Y esa estructura social (racista) se sustenta en algo cuya existencia misma pongo en duda: la raza. ¿Existe tal cosa? He convivido largo tiempo con gitanos sin más problemas que los que pueden surgir en cualquier convivencia entre personas. Nunca intentaron convencerme de nada y siempre estuvieron abiertos e interesados en dialogar y discutir sobre cualquier cuestión que se planteara. El problema surge cuando el poder establecido discrimina a personas, colectivos o grupos sociales que no se doblegan a sus exigencias e imposiciones. No existen las razas, existen explotados y explotadores.

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  4. No es que sean mejores unos u otros. Sino que han habido, y siguen habiendo, unos que joden mas que otros. El rostro pálido sigue arrasando los bosques norteamericanos, las selvas amazónicas, africanas, oceánicas.....Sigue explotando las minas de diamantes de los negros, vigiladas por sus mercenarios blancos......La verdad es, que estoy tan orgulloso de ser blanco como de español........

    Pero yo veo el racismo de mi manera. Comparemos, con permiso de la especie canina, al genero humano con los perros. Tienes perros de razas diferentes, pero el color no marca la raza. La raza la marca la morfología. Un bosquimano es un bosquimano, lo pintes como lo pintes. Un pigmeo es un pigmeo... Como en el reino animal, pienso que también en el genero humano existen razas.........Y no desprecio ninguna...porque si a alguna tuviese que despreciar, a lo mejor seria la mía.........

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  5. Sobre el concepto de raza humana ya puse una entrada en este blog:

    http://grupostirner.blogspot.com.es/2012/09/las-razas-humanas.html

    Y como bien se dice los antropólogos y los biólogos no usan tal término, se han deshecho de él. Y yo lo comparto. Aunque en el seno de la especie humana hay una diversidad morfológica, el hecho de clasificarla no tiene sentido. Claro que un pigmeo se parece más a otro pigmeo y un bosquimano a otro bosquimano, pero..., ¿bosquimanos y pigmeos son razas diferentes? Y si lo son, ¿cuántas razas humanas hay? Para mi solamente una: la humana.

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  6. Son sencillamente puntos de vista. Yo ya e dicho que no clasifico a la raza por su color, sino por su morfología. Un surafricano alvino de padres negros no es negro, es blanco. Pero si hablamos de razas con respecto a otros seres vivos, no se que problema pudiese haber el hacerlo con el genero humano....Tal vez sea que la palabra racismo viene de raza, y que el racismo lo practica el genero humano sobre su misma especie.......Sigue siendo mi opinión, mañana puede que sea otra...tenemos que seguir abiertos a la evolución.

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  7. En biología se suele utilizar más el término de «subespecie», que es sinónimo al de «raza». Aunque esta categoría no es aceptada por muchos estudiosos.

    El concepto de «especie», entre los organismos de reproducción sexual especialmente, indica una comunidad reproductiva, mientras machos y hembras se crucen y puedan tener descendencia fértil, se les considera miembros de la misma especie.

    En el seno de una misma especie biológica hay variedad, y muy grande, por ejemplo entre los lobos, los hay blancos, grises, pardos, rojizos y hasta negros. Algunos especialistas hablan de una treintena de subespecies, y otros de cuatro grandes troncos raciales.

    Además debemos incluir dentro de la misma especie lobuna Canis lupus al perro. El perro es la variante doméstica del lobo, y perros hay muchos y con formas diferentes, a esta gran variedad morfológica los criadores las llaman «razas». Y estas razas son producto de la consanguiniedad, el incesto.

    De nuestra especie Homo sapiens también se ha dicho que está dividida en razas o subespecies... Unos hablan de cuatro, otros de cinco y otros hasta más de treinta, no se ponen de acuerdo.

    Claro que hay variedad morfológica, y lo más seguro que igual que los hijos se parecen a sus padres, y los familiares a sus parientes, como más parecidos han de ser los habitantes de un área geográfica concreta con sus vecinos. Además de tener en cuenta que entre los miembros de un grupo étnico determinado se practique más la endogamia que con otros extraños. Marcar límites diferenciales en el seno de una especie, como la humana, es muy subjetivo y hasta confuso.

    Por lo cual, prefiero descartar el uso de los conceptos de «raza» y «subespecie», que no sirven más que para desconcertar.

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  8. Recuerdo yo que en la escuela nos enseñaban que existían la raza blanca, negra, amarilla y cobriza. Ese racismo de color sigue vigente en muchas comunidades del mundo...."yo no soy racista, igual me da un blanco que un asqueroso negro". Ese era, y lamentablemente sigue siendo, uno de esos chistes de los blancos.
    Por lo menos coincidimos en que el color no marca la raza. Un lobo sea blanco, negro, gris etc, es un lobo. Pero es que un negro en Africa sigue siendo un esclavo de la "raza" blanca.....Y que bonito el blanco fotografiándose con el monico negro....Y que negocios se montan los del vaticano y algunas ONGs con la miseria de esos negros....Y no hablemos del KKK. Que después de haber explotado durante siglos a los esclavos negros, ahora resulta que les estorban y los quieren expulsar de un país que pertenece a los indios......Y es que siguen habiendo blancos que son la leche.......Como decía aquel, blanco con corazón negro. Que más vale un negro con corazón blanco.................... Hablar por hablar. Saludos Pavel.

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  9. ¡Exacto!, el racismo o también supremacismo racial está basado en las relaciones de dominación. O sea, la doctrina o teoría que atribuye a un grupo humano (o raza) la superioridad sobre los demás seres humanos. El predominio de los blancos sobre los negros a lo largo de la historia, por ejemplo. Y la justificación de tal sistema social que lo defiende, como fue el apartheid, y no sólo entre negros y blancos. Implica todas formas de dominación.

    En sus inicios, durante el Antiguo Régimen, el racismo era defendido por los pensadores mantenidos por la nobleza que legitimaban la sociedad estamental del momento, argumentaban que era la expresión jurídica de la desigualdad que la naturaleza establece entre las diversas clases sociales. Y el concepto de raza era usado como sinónimo de linaje. La nobleza francesa se decía descendiente de los invasores germanos (los francos y, también, los burgundios) que al final del Imperio romano gobernaban sobre el resto de la población galorromana.

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  10. Duerme duerme negrito, que tu papi esta en el campo. Duerme duerme negrito, que su sangre esta dejando...y si el negro no se duerme viene el diablo blanco !y zas!, le come la patita....................

    El racismo sigue existiendo en la degenerada mente humana.......Lo bueno del libertario es que luchan contra todos...sin distinción de color..............

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